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            🍮 4 de julio de 2024🍮

 

La epístola a los Romanos

Romanos 6:1-23

La nueva vida en Cristo

y libertados del pecado, vinisteis a ser siervos de la justicia. Hablo como humano, por vuestra humana debilidad; que así como para iniquidad presentasteis vuestros miembros para servir a la inmundicia y a la iniquidad, así ahora para santificación presentad vuestros miembros para servir a la justicia. Porque cuando erais esclavos del pecado, erais libres acerca de la justicia. (Romanos 6:18-20).

Propósito: "Estimular al creyente a crecer en el conocimiento y la practica de la obediencia a Dios renunciando al pecado y apreciando los beneficios que se derivan de la justificación".

"Hablo como humano, por vuestra humana debilidad; que así como para iniquidad presentasteis vuestros miembros para servir a la inmundicia y a la iniquidad, así ahora para santificación presentad vuestros miembros para servir a la justicia". (Romanos 6:19). Pablo utiliza el vocablo de los hombres; ya que hace uso de palabras tales, como: "esclavo", "obedecer", "señor" y "reinar" que eran comunes entre los romanos; en ése sentido va la expresión: "Hablo como hombre, por vuestra humana debilidad"; aunque lo hace, por supuesto, bajo la dirección del Espíritu Santo, y, por lo tanto, lo que escribe es Palabra de Dios. Y continúa diciendo: "Qué así como para iniquidad presentasteis vuestros miembros para servir a la inmundicia y a la iniquidad", mejor sería: "Porque tal como presentasteis vuestros miembros como esclavos a la impureza y la iniquidad, resultando en mas iniquidad..."; "presentasteis" significa "presentar"; es decir, antes de conocer a Cristo el hombre es un esclavo del pecado que se presenta ante su amo para hacer su voluntad. Más, después de haber conocido a Cristo, el creyente tiene un nuevo amo. A eso se refiere Pablo cuando dice: "así ahora para santificación presentad vuestros miembros para servir a la justicia". "Presentad" es imperativo, y sugiere urgencia en cuanto a la acción. Este servir a la justicia tiene como resultado "la santificación". Pablo muchas veces utiliza los vocablos "justicia" y "santificación" cómo sinónimos. "Porque cuando erais esclavos del pecado, erais libres acerca de la justicia". El verbo "erais" señala una acción continua en el pasado. Esa era la condición de todo creyente antes de conocer a Cristo. El hombre sin Cristo es un esclavo del pecado. "Erais libres acerca de la justicia". En cuanto al inconverso, él no se siente obligado a obedecer la justicia, puesto que es esclavo del pecado. Su deseo e inclinación es obedecer a la injusticia. Pero, todo eso cambia con el nuevo nacimiento. Por lo que el apóstol pregunta: "¿Pero, qué fruto teníais de aquellas cosas de las cuales os avergonzáis? Porque el fin de ellas es muerte". Obsérvese que el verbo teníais señala una acción continua en el pasado, de lo cual todo creyente, al mirar sus acciones pecaminosa, ahora se avergüenza de ellas. "Porque el fin de ellas es muerte". Ése es el resultado final del pecado. Entonces, Pablo, finalmente establece: "Más ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios". "Más ahora", refiriéndose al presente inmediato: "ahora mismo". Es una alusión a la condición presente del que ha creído en Cristo. "Que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios", es decir, "habiendo sido libertados del pecado y habiendo sido hechos esclavos de Dios", es una expresión que contempla la realidad de la acción, y señala que el sujeto recibe la acción. El que ha creído en Cristo ha sido libertado de la condenación del pecado y de su dominio. Además, ha sido hecho esclavo de Dios, es decir, debe obediencia y lealtad a Dios. El fruto inmediato de esa relación es la santificación y la meta es la vida eterna. "Porque la paga del pecado es muerte, más la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro". La palabra "paga" era usada como referencia al sueldo que se le pagaba a un soldado. Es decir, el pecado tiene un salario estipulado para todos los que trabajan bajo su dominio, es, a saber, _la.muerte_. "Más la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro". La vida eterna es un regalo de Dios, y el dador de ese regalo es Cristo Jesús. El da vida eterna a todo el que cree en Él. Jesucristo dijo: "Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna; y no parecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano" (Juan 10;27-28). #Continuará.

🎵Hay vida, hay vida, hay vida en Jesús

Hay vida, hay vida, hay vida en Jesús

Yo quiero morar en la patria celestial

Porque hay vida, hay vida hay vida en Jesús🎵

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