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              🍮 18 de junio de 2024🍮

 

Romanos 4:1-5:21

La justificación por la fe

Pues la ley produce ira; pero donde no hay ley, tampoco hay transgresión. Por tanto, es por fe, para que sea por gracia, a fin de que la promesa sea firme para toda su descendencia; no solamente para la que es de la ley, sino también para la que es de la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros. (Romanos 4:15-16).

Propósito: "Demostrar cómo Dios justifica al pecador y cuáles son los resultados de esa justificación".

Pablo explica los resultados de la ley. "Pues la ley produce ira" (Romanos 4:15). La ley genera ira, no gracia. La ley fue dada para poner de manifiesto el pecado y para condenar la transgresión. De modo que, mientras mas se esfuerza el hombre en justificarse ante Dios, mas se culpabiliza a sí mismo, pues se opone a Dios haciendo a Dios mentiroso. La ley no fue dada para salvar al que la cumpla porque no hay ser humano capaz de cumplir perfectamente los preceptos de Dios. La ley fue dada para que el hombre reconozca su incapacidad de producir justicia y se refugie en la gracia de Dios. "Por tanto, es por fe", para que sea por gracia, a fin de que la promesa sea firme para toda su descendencia; no solamente para la que es de la ley, sino también para la que es de la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros" (Romanos 4:16). "Por tanto". "Por esta causa", es decir, porque la ley como tal no produce salvación "Es por fe". La promesa hecha por Dios "procede de" la fe, "para que sea por gracia". Literalmente "para [que sea] según gracia", o sea, para que armonice con el principio de la gracia. La promesa de Dios de bendecir al que cree tiene su origen en la gracia de Dios. La gracia de Dios excluye por completo la presencia de cualquier mérito humano. Por lo tanto, el hombre solo puede recibir la promesa por la fe, puesto que la fe es el único acto que no involucra obras. De modo que la promesa de Dios es tanto para los creyentes que viven durante el periodo de la ley como para los que viven fuera del tiempo de la ley, ya que la condición impuesta por Dios para heredar la promesa es solo la fe. La promesa fue hecha antes de la promulgación de la ley. De modo que los preceptos legales no ponen en peligro en modo alguno que tanto judíos como gentiles reciban por la fe los beneficios de la promesa. "Como está escrito" (Romanos 4:17), Pablo apoya su argumento plenamente en las escrituras del Antiguo Testamento (véase Génesis 17:5). La frase "te he puesto por padre de muchas gentes" señala el hecho de que Abraham es el padre espiritual de los creyentes de todas las razas o naciones. "...delante de Dios...el cual da vida a los muertos". Literalmente _"el cual vivifica a los muertos"_. Es una referencia a la Omnipotencia de Dios y a su Soberanía. Solo Dios es capaz de dar vida a los muertos (véase Juan 5:21-27). Dios vivificó la capacidad reproductora tanto de Abraham como de Sara para enviar a través de ellos la simiente (Gálatas 3:16). "Llama a las cosas que no son como si fuesen". Observese los vocablos "llama" o "llamando", "son" o más bien "siendo" y "fuesen" que es igual a "siendo". La Soberanía de Dios se extiende a todas las cosas. El escoge los instrumentos que han de cumplir sus propósitos, incluso aquellos que para el hombre son imposibles. Humanamente hablando, Abraham era incapaz de engendrar y Sara de concebir. Dios otorgó tanto a uno como a otro la capacidad para procrear a Isaac. #Continuará.

🎵La mirada de fe al que ha muerto en la cruz Infalible la vida nos da:

Mira, pues, pecador, mira pronto a Jesús

Y tu alma la vida hallará.

Ve, ve, ve a Jesús; que si miras con fe al que ha muerto en la cruz,Al momento la vida tendrás.🎵

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