👣 UN CAFECITO NUEVO CADA MAÑANA👣
🍮1 de julio 2021🍮
2 Samuel 7:2
dijo el rey al profeta Natán: Mira ahora, yo habito en casa de cedro, y el arca de Dios está entre cortinas.
David experimentó el reposo que Jehová le había dado de todos sus enemigos, y quiso edificar una casa para el Arca de Dios. Pero, Jehová dijo en sueño al profeta Natán, que dijera a David: Ciertamente no he habitado en casas desde el día en que saqué a los hijos de Israel de Egipto hasta hoy, sino que he andado en tienda y en tabernáculo. Así dirás a David: *tú no me harás casa*; sino un hijo tuyo. Y, Dios hace grandes promesas a David, afirmandole que le daría un reino eterno a través de un descendiente suyo. Este descendiente de David es Jesucristo, quien fue a la cruz para dar lugar, junto a Dios, a todo aquel que acepte su sacrificio en la cruz. Porque aceptando a Cristo, somos hechos hijos de Dios, y herederos de la vida eterna que Dios otorga, al ser borrado nuestro pecado. Al morir sobre la cruz, Cristo preparó lugar para nosotros, los que le aceptamos como Señor y Dios nuestro. Y, en la casa de su padre, en su presencia, también habrá morada si tú a Cristo aceptas.
🎵//En la casa de mi padre hay morada para ti//🎵
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