Acusación sin causa

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                               🍮24 de enero de 2024🍮

Mateo 27:12

Y siendo acusado por los principales sacerdotes y por los ancianos, nada respondió.

Este versículo nos recuerda las palabras del profeta Isaías: Angustiado él, y afligido, no abrió su boca; como cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su boca (Isaías 53:7). La acusación de los principales sacerdotes (Anás y Caifás) y "los ancianos", quienes eran los mas destacados miembros del Sanedrín, a quienes Jesús ya les había respondido confirmándoles que Él era el Mesías prometido en el Antiguo Testamento; el Ser celestial profetizado en Daniel 7:13, que vino a cumplir las promesas hechas al rey David (2Samuel 7:13-16), sugiere una acción simultánea y continúa de parte de los principales sacerdotes. Pero, Jesús no respondía palabras. Es decir, Pilato interrogaba a Jesús en el Pretorio: "y mientras era acusado", o "y mientras estaba siendo acusado", desde afuera del Pretorio. El verbo"acusar" es usado por los Evangelios sinópticos (Mateo, Marcos y Lucas) en relación a Jesús. No se menciona la clase de acusación. Pero sabemos que el Sanedrín lo acusó de blasfemia; y, como la blasfemia no constituía un delito de muerte, cabe suponer que lo acusaran de sedición y rebelión contra el imperio romano. El Señor Jesús permanecía mudo. Pilato estaba maravillado de que no se defendiera. Este era un juicio singular, diferente a todos los que había presenciado. Pilato era tan malvado como inteligente, así que entendió que las acusaciones no eran correctas, lo cual es evidente por su pregunta: "¿No oyes cuántas cosas testifican contra tí?". Los dirigentes religiosos lo acusaban de "muchas cosas", lo que sugiere que no estaban seguros de nada. La regla eficaz es que *si tienes una sola cosa válida de qué acusar a alguien, no hacen falta muchas. "Sólo una es suficiente". También estaba sorprendido de la hostilidad del Sanedrín. El gobernador estaba extremadamente maravillado, pues "el Señor no le respondió ni siquiera una palabra". El Mesías se mantuvo en el mas absoluto silencio, en sometimiento a la voluntad de Dios. En su encarnación, Jesús se sometió hasta lo sumo (Filipenses 2:5-8) y después de su muerte Dios Padre lo exaltó hasta lo mas alto (Filipenses 2:9; Hebreos 1:3). Continuará.

🎵Mas Dios, a lo sumó lo exaltó, Y Su nombre engrandeció, Para que ante su autoridad; Toda rodilla se doble, Y toda lengua confiese que Jesús es el Señor.🎵

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