



Marcos 4:41
Entonces temieron con gran temor, y se decían el uno al otro: ¿Quién es éste, que aun el viento y el mar le obedecen?
🎵Cuando se levante el mar, y los vientos soplen; me cobijare contigo por encima de la tormenta. Padre tú eres rey, tú permaneces en el diluvio, y estaré quieto, y sabré que tu eres Dios.🎵
Entonces temieron con gran temor, y se decían el uno al otro: ¿Quién es éste, que aun el viento y el mar le obedecen?
Quizás, en este momento estés pasando por uno de los momentos más difíciles de tu vida. Miras a tu alrededor, y ve que nadie puede ayudarte; quizás ve que, ninguno de los que te rodea, puede dar la orden a tu tormenta, para que se calme. Quizás piensas que, por lo grande de tu tormenta, llegó el final para tu vida, y que, las gigantescas olas, cubrirán tu vida hasta ahogarte. Pues, permíteme decirte que, aunque no lo veas, Jesús esta en la popa de tu barca; en medio de tu tormenta, tú nunca has estado solo o sola; Él siempre ha estado ahí; sólo, ve a Él; llámale, y pídele que calme tu tormenta.
Recuerda, que todo se sujeta ante el poder y la autoridad de Cristo.
¡Por eso, nada es imposible para El!
Cuando Cristo esta presente, la tormenta tiene que calmarse, y el viento, tiene que cesar.
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