👣UN CAFECITO NUEVO CADA MAÑANA👣
🍮 9 de julio de 2025🍮
JUAN 4:24-42
En esto vinieron sus discípulos, y se maravillaron de que hablaba con una mujer; sin embargo, ninguno dijo: ¿Qué preguntas? o, ¿Qué hablas con ella? (JUAN 4:27)
Aquí había una lección importante para los discípulos. Aunque el evangelio habría de predicarse primero a Israel (Mt. 10:5-6; 15:24), no sería exclusivamente para ellos (Is. 59:20—60:3; Ro. 1:16). El evangelio cruzaría todas las barreras religiosas, algo difícil de aceptar para muchos judíos. La inolvidable historia de Jonás, con su rechazo dramático a obedecer cuando el Señor lo llamó a predicar en Nínive, demuestra la actitud antimisionera judía. De hecho, Jonás se fue en la dirección opuesta. Su desobediencia no derivaba del miedo a su propia seguridad, sino a su falta de disposición para ver que sus enemigos (los odiados asirios) experimentaran la misericordia de Dios. El profeta admitió que ese era su motivo: “¡Oh SEÑOR! ¿No era esto lo que yo decía cuando todavía estaba en mi tierra? Por eso me anticipé a huir a Tarsis, pues bien sabía que tú eres un Dios bondadoso y compasivo, lento para la ira y lleno de amor, que cambias de parecer y no destruyes” (Jon. 4:2, NVI). Al igual que Jonás, los discípulos necesitaban sacudirse del provincialismo rígido de su prejuicio cultural. Necesitaban reconocer que las buenas nuevas del evangelio son para todas las personas (Ro. 10:12; Gá. 3:28). La conversación del Señor con la mujer no fue forzada, afanada o manipuladora. En cambio, Jesús orquestó soberanamente el cumplimiento de estos acontecimientos para que los discípulos llegaran en el momento oportuno. No sorprende el control providencial de Jesús, como Dios en carne humana, sobre la situación, pues Dios manejaba soberanamente todos los acontecimientos. Así, Jesús siempre actuó de acuerdo con el programa divino. En esta situación, en un pozo de Samaria, como muchas veces ocurrió en su vida, su control soberano de los acontecimientos abre una ventana por medio de la cual puede verse su deidad. Continuará
🎵Aunque indigno soy aunque nada tengo, que pueda ofrecerte divino señor yo quiero servirte con todas las fuerzas, con todas las fuerzas de mi corazón🎵
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