👣UN CAFECITO NUEVO CADA MAÑANA👣
🍮17 febrero de 2025🍮
JUAN 1:19-37
El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo. (JUAN 1:29)
La frase el siguiente día presenta una sucesión de días que continúa en los vv. 35, 43 y 2:1. Al parecer, los acontecimientos que van desde la entrevista de Juan con la delegación de Jerusalén (vv. 19-28) hasta el milagro de Caná (2:1-11), ocurrieron en una semana. Un día después de haber hablado con la delegación, vio Juan a Jesús que venía a él. Juan, fiel a su deber como heraldo y definiendo un momento redentor trascendente, llamó de inmediato la atención de la multitud cuando dijo: “He aquí el Cordero de Dios”. Ese título, usado solamente en los escritos de Juan ( v. 36; Ap. 5:6; 6:9; 7:10, 17; 14:4, 10; 15:3; 17:14; 19:9; 21:22-23; 22:1, 3) es el primero en una cadena de títulos dados a Jesús en los versículos restantes de este capítulo; los otros incluyen Rabí (vv. 38, 49), Mesías (v. 41), Hijo de Dios (vv. 34, 49), Rey de Israel (v. 49), Hijo del Hombre (v. 51) y “aquel de quien escribió Moisés en la ley, así como los profetas…: Jesús, el hijo de José, de Nazaret” (v. 45). Esa no fue una suposición por parte de Juan, fue una revelación absolutamente verdadera de Dios, como lo probaron la vida, muerte y resurrección de Jesús. El concepto del Cordero para sacrificio era conocido por el pueblo judío. Durante toda la historia de Israel Dios había revelado claramente que el pecado y la separación de Él sólo podrían removerse por medio de sacrificios de sangre (Lv. 17:11). No se podía conceder el perdón de los pecados sin que un sustituto aceptable muriera en sacrificio. Continuará
🎵Cordero, que bajaste del cielo, a morir en la cruz, para darme la luz y también salvación; vertiste tu sangre inmaculada, con la cual mi maldad, al morir tú en la cruz, la borraste Jesús.🎵
http://uncafecitonuevo.blogspot.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario