



Salmos 91:1
El que habita al abrigo del Altísimo Morará bajo la sombra del Omnipotente.
¡Qué hermosa promesa!
Todos, quisiéramos habitar en un lugar ideal y especial; provisto de protección, comodidad, seguridad y confortabilidad. Un lugar, apropiadamente hecho para nosotros. Un lugar sin peligro.
🎵Oh, yo quiero habitar, al abrigo de Dios; solo en Él hallaré paz y profundo amor; mi delicia es con Él, comunión disfrutar y por siempre su nombre alabar.🎵
Todos, quisiéramos habitar en un lugar ideal y especial; provisto de protección, comodidad, seguridad y confortabilidad. Un lugar, apropiadamente hecho para nosotros. Un lugar sin peligro.
El Señor promete que, el que se cobija bajo su sombra, es decir, bajo su poder, guía y confianza, estará seguro y apartado de todo mal. Porque, su Amor le confortará en todo tiempo, y su Justicia le abrigará y manifestará su esperanza. Y, su Paz, inundará todo su ser.
Ése, habitará al abrigo de Dios; ése, morará bajo sombras de amor; porque, aunque vengan males, podrá resistir; y un día, habitará al abrigo de Dios en su misma presencia.
Así será, todo el que confíe en Dios, porque en Él ha creído, aceptando la provisión de Dios para perdón del pecado. Que ha creído en el Cordero de Dios, Jesucristo, que quita el pecado del mundo, y vive para obedecerle, honrarle y servirle.
🎵Oh, yo quiero habitar, al abrigo de Dios; solo en Él hallaré paz y profundo amor; mi delicia es con Él, comunión disfrutar y por siempre su nombre alabar.🎵
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